Buona sera fratelli..,
Sí..., habéis leído bien,,,
En este tiempo que comienza a hacer calor ya se están preparando las ortigas para calentarnos las piernas si andamos por el campo o el monte y nos descuidamos un poco ... Nunca pensé que una planta tan odiada por mi de pequeño pudiera tener tal cantidad de usos medicinales..., es que lo cura todo.... ( fortalece el sistema defensivo, mejora la anemia, disminuye el ácido úrico, ayuda a la recuperación mental y física, antiestreñimiento, antiinflamatoria, hipoglucemiante, antihemorrágica, diurética..., mejora el acné, dermatitis y psoriasis, vale para tratar la caida de cabello y mejora la caspa, es analgésica... y ya no te digo nada usada en gripes y catarros... lo cura todo frates...)
Hasta ahora lo más cercano a comerla que yo había oido era emplearla en infusión..., pero hoy nos vamos a dar un atracón ... que nos va a curar hasta el mal de ojo...
Varias precauciones..., guantes y tijeras para recogerlas.. ( no vale "aguantar la respiración" como nos decían de pequeños..), cortarle los rabitos más gordos y cocerlas en agua hirviendo durante unos 10-12 minutos ..., dejar que se escurran bien y luego secarlas con un papel de cocina...
En este caso compramos ortigas secas ( deshidratadas) en la tienda.., suelen estar donde las algas deshidratadas, las setas deshidratadas.... la sopa de cebolla deshidratada, frutas deshidratadas... en fin, bien a la vista ...
NECESITAMOS:
- Ortigas frescas o secas
- 500 gr de tomate triturado fresco o de bote sin piel ni semillas
- 2 dl de aceite de oliva virgen extra
- 1/2 cebolla grande picada fina
- 1/2 pimiento rojo cortado en tiras finas
- Un polvito de pimienta negra molida, ajo y perejil granulado...
- 1 cucharadita de café de sal...
- Admite un poquito de jenjibre rallado... ( pero poquito que os conozco..)
- Pan tostado, 2 o 3 rebanadas del día anterior
- 1 litro de agua
Comenzamos pochando la cebolla en una sartén con el pimiento hasta que se queden bien blanditos..., a continuación agregaremos el tomate rallado o el bote de tomate al natural..., salpimentamos y dejamos que se haga a fuego lento unos 10minutos todo ello..
Cocemos las ortigas en agua hirviendo con sal unos 12-15 minutos y desechamos el agua de cocción..., separamos los tronquitos de los tallos y nos quedamos solo con las hojas..
si te acercas a ellas todavia se ven los pelillos ..., ahora ya desprovistos del ácido fórmico que le da su característico poder urticante en su medio natural...
ponemos a hervir una cazuela con 1 litro de agua con el resto de la sal y cuando hierva vaciaos el contenido que habiamos triturado y dejamos que se disuelva bien... removiendo un rato con una cuchara de palo
Finalmente agregamos el resto del pan cortado en trozos pequeños con la intención que quede sin deshacerse del todo ... como si fueran tropezones en unas sopas de ajo...
dejamos que cueza a fuego lento finalmente por espacio de 15.20 minutos... corrigiendo de sal si hace falta y removiendo cada poco con la cuchara y que se integre todo bien...
E voilà..... Sabéis que rico huele estoooo...???
Solo queda repartir la maravillosa hierba medicinal por encima y un chorrito de aceite en crudo para adornar y dar algo más de sabor...
Lo sé frates..., a estas alturas ya estáis mirando el reloj para ver si os da tiempo todavía de ir a la tienda a comprar ortigas..., pero tranquilos que hay muchos dias ... la cosa es que no os olvidéis de hacer esta sopa tan curiosa...
Y sabéis porqué odiaba de pequeño las ortigas?... muy fácil... Soy de pueblo y guardo muchas costumbres de pueblo..., verano significaba moras..., moras pequeñas significan "puede cualquiera"..., moras grandes significa "triunfo con la mermelada o la tortillita de moras"...
Pues cuanto más apetecible era la zarza y más grandes sus moras ... más ortigas tenía en su base y claro, ...en bañador o pantalón corto aquello era el infierno frates... , las piernas ardían tres días seguidos ...
Un abracito muuy apretadooo... y ya sabéis algo más sobre las ortigas...